Szczesny detuvo el penalti lanzado por Salem Al-Dawsari y se rehizo como un gato para desviar a córner el posterior remate a bocajarro de Al Burayk. Por si fuera poco, en el 55′, volvió a negar el gol a Al-Dawsari mano a mano. El meta de Polonia, que sufrió un accidente de niño, es especialista deteniendo penas máximas. El portero de la Juventus, que sigue sin encajar goles en el Mundial, se vistió de ‘Superman’ con una doble intervención milagrosa, a cual mejor, en el añadido de la primera mitad.